- mecánica NO compuesta -

- mecánica NO compuesta -

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"Cuando abres las alas en vida".

Cuando llegas a lo que no existe.

Cuando nadie te esperaba y aun así decidiste venir-vivir.

Cuando me fui, hace mucho tiempo y mi cuerpo se quedo en todas partes.

Cuando la noche y el día duermen juntos y te dejan fuera de la casa.

Cuando la agonía ya no se nota.

Cuando percibes lo violenta que es la hermosura.

Cuando aprendes a volar en cajas.

Cuando puedes hacer de cualquier lugar un espacio abierto.

Cuando dormir o despertar es el mismo acto.

Cuando aprendes de escapismo.

Cuando los recuerdos son lo que nunca fue, lo que ya no es, lo que ya no llega, lo que ya no encuentras, lo que ya se fue, a lo que no hay que ir; sino el devenir en los estímulos y afectos con los cuerpos que te creas y con los que te vas impactando.

Cuando el olvido se convierte en un vehículo para ir a alguna parte, no para volver.

Cuando la soledad comienza a ser expansiva sin la amenaza de consumirte en su abrazo.

Cuando, sin mapa, sabes el camino que se borra bajo tus pasos.

Cuando ya no esperas nada.

Cuando tantos sabores se hacen uno solo, el propio.

Cuando todo es un despliegue de secuelas esparcidas, escenarios, donde ejecutas y asumes la dirección de tus ACTOS.

Solo el director y sus actos
Sin protagonismos
Sin personajes
Sin historia que contar
Sin lugares ni compañías que inventarse

Cuando dejas el mundo y te las arreglas para hacer el mundo...

quizá uno no compuesto, quizá el de las otras formas, quizá del que nadie te habla porque no lo habitan, quizá uno que solo tu puedes componer… ¿quieres?, ¿necesitas un mundo?, ¿puedes?...

quizá recurras a la fantasía, quizá a la locura, quizá a los extraños, quizá a los imaginarios, quizá a los absurdos, quizá a teorías tiradas a la basura, o quizá te atrevas a lo que muy pocos, a crear y creer en los propios trazos. Quizá recurras a la amnesia, quizá al aislamiento o a lo concurrido, quizá a lo irracional, quizá a lo perverso, quizá a las guaridas, quizá a los lugares abiertos...

quizá a arriesgarte todo el tiempo, a perder lo que vas obteniendo, simplemente por ganarte. Ganarte es saber que de todas formas, en cualquier espacio, cerrado o abierto tu mente va a escapar a otro sitio, tu sitio... siempre que sea necesario.

Siempre que la geometría se vuelva inflexible, tu mente hallará algo para el escape, lo que sea para que no la pierdas a ella también, en lo que nada ni nadie te puede prometer o te puede dar, a ti misma, abierta-dispuesta-expuesta, construyendo entradas y salidas a espacios varios, para hacer del proceso un fluido en el que se estructura la mecánica no compuesta.